lunes, 22 de septiembre de 2014

Cotorras


Insolentes cotorras
las escupo de mi boca
no sólo arrasan 
los cultivos
con saña
además,
remedan a la abuela
en sus febriles soliloquios
cotidianos.

58 comentarios:

LA ZARZAMORA dijo...

No me digas que hasta a ti llegaron...
:(
Nidos de serpiente,... víboras que no saben más que alimentarse de una hiel que espero acabe por devorarlas entre sí.

Un mordisquito suavecito hoy bajo el lóbulo izquierdo...
y un abrazo.

Corina dijo...

Habrá que comprarse un gato...
Miau

◊ dissident ◊ dijo...

A este lado dela Atlántico también abunda, querido. Hay que dejarlas hacer su trabajo, y obviarlas.

Un fuerte abrazo

Susana Jiménez Palmera dijo...

Esas voces... esos ecos pueden aparecer a través de cualquier imagen. Suenan y retumban.
Feliz semana. Un abrazo

Amapola Azzul dijo...

Cuánto más lejos mejor.

mariajesusparadela dijo...

Pero las cotorras solamente convencen a las que son como ellas.
Y si se va la morralla, puente de plata y cuesta abajo.

la MaLquEridA dijo...

¡Malditas cotorras! Son una lacra.


Besos Dario

Anónimo dijo...

Malditas... quien pudiera callarlas.

Errata y errata dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
MoniRevuelta dijo...

Yo hablo poco, te lo juro que sí
Un beso:)

Blue dijo...

¿En qué quedamos? ¿No era tan importante la lengua?, jaja.

Besos.

Amapola Azzul dijo...

La verdad, si te soy sincera me gustaría escupir asi de bien a los cotorros.

Mirella S. dijo...

Pienso que todo bicho cumple una función en la naturaleza, pero la de las cotorras no logro descubrirla... y encima repiten los soliloquios de la abuela.
Abrazo, Darío.

lichazul dijo...

cotorras y cotorros los hay como hay mudas y mudos
todo tiene su opuesto

abrazos Darío y buena semana

Gabriela dijo...

me encanto la ideita del gato....

TORO SALVAJE dijo...

Las cotorras me hinchan la cabeza.
Están por todas partes.
Hablan y hablan sin parar y en realidad no dicen nada.

Saludos.

Marga dijo...

Pobres cotorras... y ahora me hacen más gracia imaginándolas imitando a las abuelas.

Abrazo!

Sergio DS dijo...

Las cotorras son insaciables, amigo.

Verónica Durán González (dientedecoral) dijo...


no se puede hablar con la boca llena de plumas

un abrazo

Mientrasleo dijo...

Conozco gente así
Besos

Amapola Azzul dijo...

He vuelto a tu nido, Darío porque por lo menos aquí hay silencio.

Así que enhorabuena, amigo .

EvaBSanZ dijo...

Y cuando llegan las cotorras al último oído nada de lo anterior se dijo.

Un beso Darío

Cecy dijo...

Que bien me llevo con mi gato.

Le dejo joven, un abrazo inmenso porque le he extrañado:)

Carmela dijo...

Igual aprenden los soliloquios y los propagan, no.
Un abrazo.

Lapislazuli dijo...

Sonido de vida
Abrazos

MAR dijo...

Sí y peor son las cotorras humanas...que hablan tantas huev...........
Un abrazo grande para ti, seré breve jeje para no marearte.
mar

Cora dijo...

cotorras oor todos lados jajaa

besitos Dario

Verónica Calvo dijo...

Te aplaudo el poema, Darío.

Esas cotorras ni debajo del agua callan.

Mamen dijo...

¡Qué se mueran las cotorras!

Jo dijo...

un bozal... :) o dales un pan

Geraldine, dijo...

son plaga esos bichos...me imagino tu boca como una jaula abierta...

Luján Fraix dijo...

Hay silencios tan necesarios frente a tanta palabra alborotada.
Besos

Maijo Ginovart dijo...

Pero las escupes muy bien.

Amapola Azzul dijo...

Tengo mucho lío con las estaciones en los distintos países.

Besos.

Isabel Martínez Barquero dijo...

Aplaudo tu determinación con semejantes bichas.
Besos.

Amapola Azzul dijo...

Habrá que ponerles el termómetro Darío, a esas conversaciones para poner remedio a esas fiebres.


Y dejar que los cultivos crezcan bien.
Un beso.

Amapola Azzul dijo...

Te vas a quedar sin saliva, mi querido Darío...

Que haya suerte con los nuevos cultivos Niño.



GEORGIA dijo...

me gusta la contundencia de los versos, un abrazo

David Mariné dijo...

me gustó el comentario de Verónica - Mujerciervo - pienso es la puntilla perfecta para las abuelas.
abrazo.

Licantropunk dijo...

Ja, ja, ja. Espléndido. Puto destino que me arrancó la oportunidad de ser abuela y soliloquiar febrilmente.
Saludos.

U-topia dijo...

Los pájaros no me gustan mucho pero las humanas me resultan odiosas directamente.

El poema, en su brevedad, es redondo.

Un abrazo!!

Amapola Azzul dijo...

Sólo paso a saludarte , Darío.
que sigan volando las alas de tu poesía así.

Amapola Azzul dijo...

Feliz semana y buen finde este Andalucía.

marichuy dijo...

Y pensar que ese tipo de cotorras abundan…
Un abrazo

La sonrisa de Hiperion dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
La sonrisa de Hiperion dijo...

Y no paran las jodías...

Saludos.

María Socorro Luis dijo...


Insolentes cotorras, sí, pero protagonistas de un excelente poema.

Buenas noches, feliz sábado

Sandra Garrido dijo...

Son estridentes las jodias. Yo estuve a punto de cargarme a una con un tenedor, jajajaja.
La vieja el visillo que las llama Mota.

Un abrazo

lichazul dijo...

abrazos gorditos de esta cotorra , ten un comienzo de semana precioso Darío
mil gracias por tus huellas

lichazul dijo...

pd... que seríamos sin ellas(cotorras) Darío
hay que vomitarlas como sea
por el pixel se quedan
otras se fijan al papel

muak

Maripaz dijo...

Huyo de las cotorras como de la misma peste. Y en pocas palabras las has descrito brillantemente.
Besos.

Amapola Azzul dijo...

Te vas a quedar sin saliva...

Amapola Azzul dijo...

Un beso.

Guárdate un poco.

Luján Fraix dijo...

Buenas noches Darío, gracias por estar siempre.
Besos

Amapola Azzul dijo...

Buenos días Darío, debes de estar lejos de tu blog ahora, sumido en tu queceras cotidianos, harto ya de cotorras, con la saliva íntegra...

Pero la pluma y la tinta , gastadas de escribir estos bellos versos.

Salud.

Ese trozo de poesía que te vio nacer no lo han visto aún esas cotorras... sino las callarías para siempre.

Ricardo Guadalupe dijo...

Remedar, algo que tú no haces, puesto que tus textos siguen un molde propio, son originales, diferentes, personales.

Un abrazo

Verónica Durán González (dientedecoral) dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Isabel dijo...

Ja, ja, ¡qué buena metáfora!